Buscar este blog

ANTERIORES

Los sueños son clandestinos salvo para el valiente

miércoles, 15 de junio de 2011

Campeón

El tiempo poniendo a cada uno en su lugar. Grima, qué grima. Permití que los sueños desarrollasen la fantasía primitiva, de la cual hasta hace poco fui inconsciente. Grima, qué grima. A las erupciones volcánicas les siguieron extremas tempestades. Los tornados cubrieron toda la ciudad; en el arte de volar ya no soy un virtuoso. Las corrientes me elevan y separan de las masas más de 500 metros y salgo despedido hacia el cielo, casi hasta el infinito, hasta toparme con un cuerpo con el que volver a controlar el vuelo. Entretanto, el aire de mis pulmones es aspirado hacia el exterior, quedándome vacío y angustiado, ahogándome, haciéndose el tiempo eterno. Casi eterno.

Cuando anochecía en Ocarina of Time, el cielo enrojecía. En el desierto de las Gerudo, la arena cubría la atmósfera. Ahora la ciudad tiene un poco de los dos momentos. Es el mundo en su fin. En el Apocalipsis tenemos las mismas dudas, que se acrecientan. De algún modo nuestros sueños se mezclan y el resultado no nos permite recordar lo que soñamos al despertar. Un retrato de lo poco que tenemos en común. Tenemos tiempo de hablar, pero ya no es mucho. Ni lo vivimos tan intensamente. Hemos logrado proyectarnos tal y como somos ahora. Pero físicamente. No disponemos de ningún libro de bolsillo que nos traduzcan los diálogos ni los textos del menú.

No disponemos de ningún libro de bolsillo, con ese característico y eterno olor a tinta, que nos traduzca los diálogos ni los textos del menú.

Mis sueños, solos y junto tus sueños, se parecen más a la realidad. Lo asumo. Si al borde de la extinción, nos salvamos individualmente, ni merece la pena soñar. Excepto por cuando sonríes, confidente.

Sé que has visto con los años que también existo
y que el tiempo nos ha puesto a cada uno en su lugar.
Todo lo que te ha ocurrido, todo estaba ya previsto.

Lástima ... me ha pasado por hacerme el listo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario